En todo lugar hay un hormiguero, en Venezuela hay unas hormigas que llamamos “Bachacos” son grandes, cabezonas y de un color rojo claro, sus hormigueros son grandes, y al igual que toda buena hormiga son trabajadoras, pero por desgracia en mi país algunas personas han enseñado a los niños a que jueguen un juego de “peleas de bachacos” que es agarrar dos bachacos y hacer que se peleen colocando uno encima de la cabeza del otro, también me percaté que algunas personas tienen la mala costumbre de dañar las casitas de estos habitantes de la ciudad, comprendo que quizás alguien no quiera que estén en su casa, pero cuando estos animalitos hacen sus casitas en la calle o en algún lugar público como un parque, no entiendo cómo hay personas que por mera maldad destruyen las casitas, ¿cómo te sentirías si un enorme e idiota gigante destruye tu casa con un pie?, una casa que tú mismo hayas construido, donde está toda tu familia, y que ese gigante la aplaste sin importar que dentro de la casa esté tu familia, ¿cómo te sentirías?.
Cerca de mi casa hay un instituto y en la acera hay como 4 casitas de bachacos, la gente pasa por allí y es bonito ver que los valencianos van mirando al piso para no dañarles las casitas, afortunadamente por allí no transita mucha gente y los que por allí pasan tienen cuidado y lo noto porque todos los días paso por allí.
Tenemos que aprender muchas cosas de estos animalitos, una de ellas es que al llegar a la vejez se "jubilan" dejan de cortar hojas, pero son de ayuda a las demás, aunque son ancianas no dejan de ser útiles, pues dejan a las jóvenes cortar las hojas, ya que al envejecer sus mandíbulas se han desgastado (Esto según un investigador que se llama Robert Schofield que documentó muchas cosas sobre estos animalitos), por lo tanto, ellas colaboran arrastrando las hojas a sus casas, ¡nunca se es viejo para ayudar!. Liliana.
Tenemos que aprender muchas cosas de estos animalitos, una de ellas es que al llegar a la vejez se "jubilan" dejan de cortar hojas, pero son de ayuda a las demás, aunque son ancianas no dejan de ser útiles, pues dejan a las jóvenes cortar las hojas, ya que al envejecer sus mandíbulas se han desgastado (Esto según un investigador que se llama Robert Schofield que documentó muchas cosas sobre estos animalitos), por lo tanto, ellas colaboran arrastrando las hojas a sus casas, ¡nunca se es viejo para ayudar!. Liliana.
Estas fotos las tomé el 31 de diciembre´del 2011, acá están nuestras amigas cargando un pedazo de corteza vegetal... "Vamos muchachos, ya casi estamos cerca del hormiguero..."
"¡Mira chamo púyalo que esto va para la cena de fin de año!"
"¡Vamos!¡Sigan marchando!"
Este es el hormiguero de los bachacos que vi.
Y esta soy yo observando el caminito que hicieron llevando todo tipo de alimentos para su cenita de fin de año...Espero les haya gustado esta entrada. Liliana.
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